La asistencia a sesiones de fisioterapia puede ser asimilada a una consulta médica, siempre que exista una prescripción médica o facultativa que lo justifique.
La jurisprudencia ha reconocido que las sesiones de fisioterapia para rehabilitación, cuando están prescritas médicamente, pueden considerarse como consultas médicas. Esto se refleja en la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura de 1 de diciembre de 2005, que asimiló la rehabilitación a una "consulta médica" en un contexto donde el convenio colectivo solo mencionaba consultas médicas para permisos retribuidos.
Por lo tanto, si en tu empresa se conceden permisos retribuidos para consultas médicas, deberías considerar las sesiones de fisioterapia prescritas como parte de este permiso, en lugar de descontarlas de la bolsa de horas.