Un trabajador solicita un permiso retribuido, pero la empresa no responde a tal solicitud.
El trabajador entiende que existe un silencio positivo en su favor y, por tanto, debe presumirse concedido el permiso solicitado.
¿Es cierto que si el trabajador solicita un permiso y la empresa no contesta, debe entenderse concedido por silencio positivo?
El trabajador podrá disfrutar del permiso si se solicita por un hecho causante que concurre efectivamente (hospitalización, fallecimiento, intervención quirúrgica de un familiar, etc.) en cuyo caso no será necesario esperar la aceptación de la empresa.
De esta forma, el permiso retribuido no depende de que la empresa lo acepte, sino de que concurra el hecho causante que da lugar al disfrute del permiso. Cuestión diferente serán unas vacaciones o un permiso retribuido por asuntos propios, lo que siempre requiere de aceptación por la empresa. El silencio no genera acuerdo entre las partes, por lo que no procede el permiso en este caso si es por asuntos propios o vacaciones.