Sí, la reducción a 37,5 horas semanales podría afectar a su empresa, incluso teniendo un convenio que establece 1.744 horas anuales. Es importante analizar cómo se distribuyen esas horas a lo largo del año para determinar si la futura reducción tendría un impacto real en vuestra jornada laboral. Aunque en principio esa cifra anual parece estar próxima a lo que implicaría una jornada reducida, todo dependerá de la forma en que esas horas se reparten entre los días y semanas laborales efectivas.
Actualmente, la jornada máxima legal en España es de 40 horas semanales en promedio anual. La futura reforma legal, aún en tramitación parlamentaria, plantea reducir esa jornada a 37,5 horas semanales, lo que equivaldría, en términos anuales y descontando vacaciones y festivos, a unas 1.687,5 horas efectivas aproximadamente. Es decir, una vez que se descuenta el tiempo no trabajado —como vacaciones y días festivos—, lo relevante no es solo la cifra total de horas anuales pactadas en convenio, sino cuántas de esas horas se distribuyen en semanas laborales de más de 37,5 horas.
Por tanto, si en tu empresa se están realizando semanas laborales de 38, 39 o incluso 40 horas para alcanzar las 1.744 horas anuales, entonces sí habría un impacto directo con la entrada en vigor de la nueva ley, ya que las empresas estarían obligadas a no superar el nuevo umbral legal. Esto significaría que el convenio debería adaptarse a la normativa mediante una redistribución del tiempo de trabajo o una reducción de las horas anuales.
En cambio, si las 1.744 horas se distribuyen en semanas que ya se aproximan o incluso están por debajo del nuevo máximo legal de 37,5 horas semanales, es probable que la nueva ley no altere significativamente vuestra jornada, o que los ajustes necesarios sean mínimos. En este sentido, es clave revisar el calendario laboral de la empresa y calcular cuántas horas semanales efectivas se están realizando realmente a lo largo del año.
En conclusión, aunque tu convenio establece 1.744 horas anuales, lo que podría situarse cerca del nuevo umbral, será necesario revisar cómo se reparten esas horas en el calendario anual para evaluar si la reducción legal tendrá efectos prácticos. Si se supera el nuevo límite de 37,5 horas semanales en promedio, entonces sí os afectará y la empresa deberá adaptar su organización del trabajo a la nueva normativa.