Buenos días:

En estos casos, se procede, dejando que el trabajador siga en excedencia voluntaria, ya que habrá que esperar a que el trabajador solicite la reincorporación para decirle que el centro de trabajo está cerrado y no hay vacante por imposibilidad.

En primar lugar, el artículo 46 ET regula dicha excedencia voluntaria. Los efectos que esta produce, entre otros son: la no extinción del vínculo laboral y el derecho preferente al reingreso en caso de existencia de vacantes de igual o similar categoría.

Además, si durante la excedencia se produce el cierre de la empresa por despido colectivo autorizado por un ERE, el trabajador excedente no tiene derecho a percibir indemnización por la extinción del contrato. Por otra parte, si la empresa sufre un proceso de reconversión industrial que afecta a un número limitado de trabajadores, o sucesivos expedientes de suspensión o extinción que no afectan a la totalidad de la plantilla, aunque no se produzca el reingreso por falta de vacante, no se descarta que al varias las circunstancias pueda tener lugar (entre otras, sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid de 30 de mayo de 1997).

En vuestro caso, se trata de un cierre de centro de trabajo, por lo que no hay que comunicar nada al trabajador. Será él el que comunique su reincorporación, y vosotros tendréis que contestarle diciendo que no hay vacante, ya que el centro de trabajo se ha cerrado. Si fuese a juicio, se declarará el despido inexistente por imposibilidad de reincoporación, sin que sea necesario que lo recoloquéis en otro centro de trabajo. Entre otras, dicha doctrina se defiende, en sentencias del TSJ de Asturias, de 12 de septiembre de 2003, TSJ de Navarra, de 21 de diciembre de 2007 y TSJ de Valencia, de 17 de enero de 2006.

Esperamos haber resuelto su consulta.

Reciba un cordial saludo.